El bit es la unidad mínima de información de una computadora digital, que sólo puede tener dos valores, cero o uno.

A partir de esta simpleza se han diseñado y construido circuitos muy complejos que han evolucionado hasta tener la forma de las modernas computadoras, teléfonos y tabletas.

Con los unos y ceros que manejan las computadoras se ha creado una de las revoluciones tecnológicas más importantes de la humanidad.

La revolución electrónica continúa y no sabemos donde va a parar a pesar de que se llegue al límite en la reducción del tamaño de los transistores que cada vez se acercan más a las dimensiones de los átomos. Quizá llegue el momento en que ya no sea posible integrar mucho más capacidad de procesamiento en cada vez menos espacio pero aún nos falta mucho para aprovechar lo que ya tenemos.

Hoy tenemos a nuestro alcancé mucho más información que la que podemos procesar cómo personas o de la que tenemos voluntad para intentar entender. Por un lado existe demasiada información disponible, cada día se crea mucho más de la que podemos consumir, cada día se suben más vídeos a Youtube de los que podemos ver en un año o más. Cada día se escriben más libros que los que podemos leer en una vida. Claro, escribo esto sin consultar internet para dar números precisos, pero lo importante es la aproximación de la idea.

Sí claro, los avances continuarán, al parecer la tecnología ha tomado vida propia y como tal, tiene su agenda muy particular. Seguirán además mucho más personas sumándose a la ola tecnológica tanto para generar información como para consumirla, más de esto último.

Incluso las cosas mismas, los coches, los controladores de aire acondicionado, los relojes, las paredes, el suelo, la ropa, el tostador de pan … generarán cada vez más información y la comunicaran de diversas formas, incluso vía Twitter, como algunos refrigeradores lo hacen ya.

Estamos creando no sólo una nube digital, si no todo un planeta virtual quizá mucho más grande y complejo que el planeta tierra mismo. El reto será mantener este nuevo planeta a un nivel de inteligencia y apertura para que la evolución sea positiva, creativa, que no destruya en el proceso al planeta tierra y cuyo resultado sea mejorar el nivel de vida de la mayor cantidad de personas.